Escultura decorativa tallada a mano en madera teka por artesanos nativos de la isla de Sumba, perteneciente a la provincia de Nusa Tenggara Oriental en Indonesia, en esta cultura los caballos son vistos como seres sagrados y como símbolo de estatus social y riqueza, por lo que suelen ser entregados como dote durante las bodas. Estas esculturas logran reflejar a través de sus patrones geométricos la conexión entre el hombre, la naturaleza y lo divino, lo cual hace de esta una pieza altamente valorada por su riqueza cultural y su vinculo con la espiritualidad en esta región.